Creó su propio estudio de arquitectura en 1969 y en el año 1979 le concedieron el premio anual del Instituto de Arquitectura de Japón, por su casa Row, situada en el barrio de Sumiyoshi en Osaka, el cual era un apartamento de hormigón, situado en una manzana de viviendas tradicionales japonesas.
Entre sus demás obras destacan:
- La Iglesia del agua (1985) en Tomanu, Hokkaido, en la que los bancos se orientan hacia un lago artificial del que surge una luz de hormigón.
- El Museo de los Niños (1990) en Himeji, en Hyogo.
- Punta della Dogana (2007-2009) en Venecia (Italia).
Ando es un teórico prolijo, considerado como uno de los portavoces del regionalismo crítico, que rechaza el empleo indiscriminado de la arquitectura moderna en todas las culturas del mundo.
Su arquitectura combina formas y materiales del movimiento moderno con principios estéticos y espaciales tradicionales japoneses, sobre todo en el modo de integrar los edificios en su entorno natural. Una de sus características es el empleo del hormigón liso, con las marcas del encofrado visibles, para crear planos murales tectónicos, despojados de toda ornamentación, que sirven como superficies para captar la luz.
En 1992 proyectó el Pabellón de Japón para la Exposición Internacional de Sevilla, construido en madera siguiendo la tradición constructiva japonesa.
Fue honrado con el recibimiento del premio Pritzker en el año 1995, además recibió la Medalla de Oro que concede la Acadamia Francesa de Arquitectura.
Publicada por: Pablo Morales Pérez
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